CLUB DE LECTURA DEL IES TIERRA DE CIUDAD RODRIGO

CLUB DE LECTURA DE LA BIBLIOTECA DEL IES TIERRA DE CIUDAD RODRIGO

martes, 10 de diciembre de 2019

Relatos ganadores de Halloween



EL INSTITUTO
TERROR


Capítulo 1

Escrito por Renata

Raula solo llevaba dos días desaparecida así que, cuando los policías encontraron su cadáver en el descampado cerca del instituto Terror, todos nos quedamos boquiabiertos y ojipláticos. Y lo que es más raro aún, desde su muerte no paran de ocurrir unos extraños sucesos en clase de Lengua. Al principio eran poca cosa: las hojas informativas se despegaban solos del tablón de anuncios y los libros caían al suelo provocando un fuerte sonido; pero hoy ha sido el primer día que llevaban a algo peligroso.

Julia, la profesora de lengua se ha caído por las escaleras y se ha roto una pierna como consecuencia del accidente. Podréis pensar que simplemente se ha tropezado y que le podría haber pasado a cualquiera, pero Mía (una chica de mi clase) afirma haber visto a Raula (bueno, a su fantasma) empujar a Julia por las escaleras.

Al principio, no me lo creía, pero después de descubrir que puedo hablar con Raula porque somos gemelas voy a tener insomnio el resto de mi vida.

Anoche, Raula me susurró “Lengua…matar…”.No pude oír nada más, pero estoy segura de que dijo algo más que gemidos de fantasma.

No sé que es lo que quiere Raula y qué tiene que ver con Julia y con su asignatura, pero estoy rota de dolor por perder a mi hermana, así que pienso ayudarla a conseguir su objetivo, sea el que sea.

Capítulo 2
Escrito por Mía

Aún no me creo que pueda hablar con Raula. ¡Es algo alucinante! El problema es que la veo medio borrosa y cada vez que intento fijar la mirada para verla mejor acabo desmayándome y olvidándolo casi todo. Tenía que pedir ayuda, así que le he contado a Iván todo lo que sé sobre mis nuevos poderes y lo que he descubierto sobre Raula. Al final hemos decidido colarnos en el instituto Terror esta noche para grabar a Raula y qué es lo que hace. Y por si acaso no podemos grabarla, hemos pensado en grabarle la voz. Habrá alguna manera de hacer que hable, digo yo.



Decidido, haremos una especie de ritual para hacer qué aparezca y así poder grabarla. Si enseñamos el video a algún adulto medianamente responsable nos ayudará a mandar a Raula al cielo (o al infierno, por intento de asesinato).


Capítulo 3
Escrito por Iván

  • Bueno, aquí estamos, en el instituto Terror. De noche. Solos. Sin batería en los móviles – dije sin darme cuenta.
  • Yo tengo batería de sobra, ¿Cómo quieres que grabe sino? – contestó Mía.

Yo solté un suspiro de alivio y me puse manos a la obra. Cogí la horquilla que había traído Mía y forcé la cerradura de la puerta del edificio. Entramos sigilosamente en el instituto y, como era de esperar, la puerta se cerró ruidosamente detrás de nosotros. Era como si Raula nos estuviera esperando.

Entonces, Mía sacó su teléfono móvil y comenzó a grabar:

  • Hola, soy Mía y este de aquí es mi compañero Iván – yo saludé a la cámara tímidamente – nos encontramos en el instituto Terror para investigar el caso del fantasma de Raula. ¿Qué opinas Iván?
  • Que te has quedado sola, maja. – dije y salí corriendo. Entonces se oyó un fuerte ruido y escuché a Mía decir:
  • ¡Oh, no! ¡Si muero aquí quiero que sepáis que os quiero Papá y Mamá! ¡Y a ti, Iván, te veré en el …! – no pude escuchar más, excepto la voz de… ¡Renata! ¿Estaría por aquí?


Capítulo 4
Escrito por Renata

Anoche Raula volvió a hablar conmigo. Me dijo que fuera esta noche al instituto y la buscara, que me estaría esperando en el departamento de Lengua. Así que aquí estoy, en el departamento de Lengua con Raula.

  • Voy a contarte un secreto – me dijo – Tienes que prometerme que me ayudarás con mi venganza porque… ¡Julia me mató! ¡Es una asesina que se disfraza de profesora para poder matar niños! ¡Tiene algo en contra de nuestra familia y al matarme de dijo que después iría a por ti!

Yo por poco me desmayo al oir aquello ¿Cómo podía ser?

Por supuesto salí corriendo del departamento de Lengua tan rápido como pude y me choqué con Iván. Al poco rato encontramos a Mía y me contaron la historia.





Al día siguiente llamamos a la policía y detuvieron a Julia. Durante unos días todo fue normal (la nueva profesora de Lengua es muy maja y no quiere asesinarnos). Pero un día Mónica, una chica de mi clase apareció muerta en el mismo sitio donde encontraron el cadáver de Raula y entonces descubrimos que la profesora de Lengua había vuelto y que no iba solo a por mi familia sino que quería matar a toda mi clase.

Lo único que sabemos ahora es que se ha disfrazado de profesor y que debemos acabar con ella, antes de que sea demasiado tarde.

FIN


                                                          Zoe Páez Acuña (1º ESO)


                                               

THE SAND  (El demonio de Ella)
Rondando el año 1982, cuenta la leyenda, que en Hawkins, una niña estaba jugando en la arena del parque con otros niños, cuando de repente comenzó una fuerte tormenta. Inmediatamente, todos los niños se fueron de allí, asustados, hacia sus madres. Excepto aquella niña, a la que no parecía preocuparle. Su madre la llamó, pero esta parecía no escucharla. La madre de la niña siguió llamándola, pero sin resultados, ya que esta no hacía caso. De pronto, la niña comenzó a sentir que la arena quemaba. No le dio importancia, cuando al instante sintió un dolor terrible en las piernas. Vio como poco a poco se le empezaba a desgarrar la piel y como sus músculos se rompían lentamente. La sangre le recorría todo el cuerpo, y cuando intentó gritar, una enorme bola de sangre salió de su boca y se le comenzaron a coser los labios. La niña dolorosa intentaba escapar, mientras su madre mira aterrorizada a su hija, gritando su nombre. Ella. Así se llamaba la niña que desapareció desangrada en la arena aquella tarde de tormenta.
                                                       Kiara García Martín 2º PMAR





VENGANZA

La guerra había terminado y Troya dormía tranquila. Y yo, como cada noche, me disponía a salir a escondidas para verla y fundirme en sus cálidos labios. Pero lo que encontré al llegar a nuestro rincón secreto no fue para nada lo que mis ojos deseaban ver; su cuerpo yacía en el suelo, cubierto de un manto infinito de sangre.

Ante aquella escena que no podía parar de mirar, fui testigo de como aquel caballo enorme entraba en la ciudad, pero ya poco importaba. Fuera de mí, sin controlarme, cogí mi espada y hui en busca de venganza, sin saber muy bien con quién podía descargar toda mi furia y rabia. Aunque era cierto que no me importaba equivocarme. Y así lo hice. Fui casa por casa matando a pobres inocentes que no tensión culpa de mi pérdida. Pero yo no sentía compasión, era como si  su sangre me alimentase y avivase mi deseo de acabar con la vida de todos aquellos que se cruzaban por mi camino.
Poco tardaron los soldados enemigos en ayudarme a cobrar venganza, inundando todo Troya de fuego, que iría matando a todos los habitantes de la ciudad. No sentía miedo. Ni tan siquiera dolor. Sentía, más bien una sensación de alivio, aunque no entendía muy bien por qué.
El fuego iba arrasando con todo, incluso con el frío que en día vivíamos, ya que era el comienzo del invierno. Decidí quitarme la chaqueta que estaba llena de sangre por todas las muertes a las que había asistido. Dejé mis brazos al descubierto, y ahí fue cuando lo vi. Cuando me di cuenta. Tenía una herida profunda en mi brazo izquierdo. Alguien me había clavado sus uñas. Y me acordé de su cuerpo en el suelo, cubierto del manto de sangre que tan solo le cubría hasta la cintura. Sin embargo, recordé que sus uñas estaban cubiertas de rojo. Entonces lo entendí: quien había matado a la mujer de mi vida era el mismo que en ese momento deseaba volver a perderse en sus labios y olvidar aquella pesadilla. Pero eso, desafortunadamente, no pasó.
Entonces, aprovechando que la ciudad ardía, decidí hacerlo yo también adentrándome en el fuego más grande y caluroso que había visto en mi vida y el cual me redujo a unas inútiles cenizas. Ese fue el momento en el que Hades, quién me había robado el alma y había habitado en mi cuerpo, volvió a su lugar, el inframundo, muy orgulloso tras haber realizado su misión

                                                                                        Patricia Sánchez Lorenzo 1º Bach B


No hay comentarios:

Publicar un comentario